sábado, 18 de enero de 2014

Vías muertas” versus “La letra pequeña del deseo

Historia de cómo ganar en un intercambio de novelas

Hay personas que por donde pasan la van liando parda y no voy a citar a nadie por no nombrarme a mí mismo, pero en cambio otras se pasean por aquí haciendo gala de una discreción encomiable. La prudencia, el respeto y la educación son su bandera. La escritora y periodista bilbaína Susana López es un ejemplo de lo que digo, y además una de mis “muy mejores amigas” desde mis principios del facebook.  Aclaro esto,  para los mal pensados que crean que me dejo llevar por la pasión, que sepan que están en lo cierto, me rindo ante la inteligencia, la delicadeza y el buen gusto de Susana. Sin darle mucho bombo, intercambiamos nuestras novelas (Su “Vías muertas” versus mi “Letra pequeña del deseo”) y esa misma noche comencé a leer. El primer contacto con la novela fue desalentador, una cita a San Agustín que me provocó un retortijón de aúpa; la cita del santo  me trajo a la mente mi turbulenta adolescencia con los padres agustinos y después, las escabrosas escenas del primer capítulo de mi novela bajo los que suponía,  inocentes ojos de Susana López, que para más inri, se llama igual que la protagonista —¡Joder, empezamos bien! Yo con el santoral y ella con el cibersexo, el yin y el yan, pero al revés —cito literalmente mi pensamiento. Pero nada más adentrarme en el texto el panorama cambió. En el primer párrafo de “Vías muertas” ya intuí que tenía entre las manos algo diferente y especial, una narrativa llena de colores y matices que convierte la lectura en un paseo en globo por las nubes. Fluida, pero al mismo tiempo con una densidad de contenido que te incita a descubrir el por qué de cada coma. Un lenguaje cuidado de forma milimétrica acompañado de reflexiones que te hacen detenerte para asimilar las intenciones en profundidad. La fina ironía está presente y hasta te saca una sonrisa cuando menos te lo esperas. A pesar de ser un claro ejemplo de “novela negra” su estructura brilla con luz propia.  La trama de “Vías muertas” es superior,  nos hace acompañar al inspector Argimiro Pérez en su “huida” desde Bilbao a Segovia, buscando las bondades del servicio policial rural y una nueva vida pero va a descubrir que no era tan sencillo como presuponía. “En todos sitios cuecen habas”.  Los personajes secundarios son tan reales que pudiera decir que hasta los he conocido en persona.  La impresión que da, no es de buena documentación, si no que Susana López estaba destinada como corresponsal y tomando nota de cada lugar, cada acontecimiento, cada gesto, sencillamente sublimes las descripciones. Es tan real, que en muchas ocasiones me ha hecho parar la lectura y plantearme de dónde habrá sacado la información para completar esta magnífica “Vías muertas”. En resumen y como no me gusta destripar las novelas, solo puedo decir que es una de las novelas que mas me han gustado de los últimos tiempos. No sé si ha quedado patente.  No puedo destacar nada en concreto de “Vías muertas” porque sencillamente es un conjunto impecable y no me aventuraría a tocar ni una coma. Os invito a que conozcáis el trabajo de esta gran escritora, Susana López, que en silencio pide a gritos que disfrutéis con su delicado trabajo. Para los que pululan por las redes apostando por escritores “poco conocidos” Susana López y su novela “Vías muertas” son un caballo ganador. Personalmente me quito el sombrero y me congratulo del timo que le he hecho cambiando mi novela por sus “Vías muertas”. Vacas por pajaritos. Siempre dispuesto a estos intercambios Susana López, un honor.
Una sola objeción al trabajo de Susana López, imperdonable valoración, por ahí no paso. En un momento, la novela “Vías muertas” hace referencia a la cantante italiana Sabrina, a la que  “fortuitamente” se le escapó un pezón de sus contundentes pechos delante de las cámaras de tv a finales de los 80. Susana López califica la carrera de esta ilustre cantante como “efímera” y no puede estar más equivocada. La imagen de ese “pezón itinerante” se mantiene perenne y viva en los sueños de todos los hombres españoles que tuvimos la fortuna de contemplar tan glorioso  evento. Si no, pregúntale al que tengas más cerca y peine canas.
Solo en formato “libro en papel” al precio de 14,95€
http://www.editorialsepha.com/n/len/0/prd/799/vias-muertas 
         
 

1 comentario:

  1. Apuntada y ya con los dientes largos, porque lo que has contado me causa curiosidad e interés a partes iguales. Me gusta la novela negra y si se desarrolla fuera de los escenarios habituales, mucho más. Este mes he cubierto el presupuesto en libros, pero al que viene seguro que cae. Gracias por el descubrimiento. Un beso.

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